domingo, 27 de abril de 2014

Recuento de cuatro días atrasados: mi primer concierto

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Domingo 27 de abril (2014):

La última vez que pude escribir fue el miércoles, así que hay varios días que resumir. Empecemos.

El jueves (24) había quedado de reunirme con Kurihara-sensei a las 11 y 30, pero me había pedido que lo llamara en cuanto fuera a llegar. Le escribí diciéndole que era mejor llamarlo a las 11 para ver si siempre podía recibirme. Así lo hice pero no respondió, así que lo llamé a las 11:30 y me confirmó que podía asistir. La dinámica será así: me va a dar el curso solo a mí, pero con flexibilidad. Me pidió que le dijera a cual maestría quería aplicar y qué temas me interesaban. Le pedí tiempo, pues eso me consumiría mucho tiempo y me dijo que se lo enviara el fin de semana.

Pasadas las 12 fui a la shiryoushitsu del profesor Shigeta para ayudarle a su asistente con el material del día. No la encontré, así que empecé una búsqueda no muy eficiente, hasta que fui a esperarle en donde tenía que llegar de último para pedir el material para la clase. Mientras la esperaba, dos de las personas de ahí se interesaron en mí y estuve hablando un rato con ellas, hasta que llegó la asistente de Shigeta-sensei.

Me senté adelante y grabé la clase. En parte, la entendí mejor que la vez pasada. Devolvimos el material y listo. Al terminar esto decidí hacer la tarea del profesor Yaeshima, buscar japoneses para practicar unas cosas. Me tomó más tiempo del que pensé, pero cuando terminé, Nana me contactó para ir al círculo de español en su primer día.

Llegaron Nana, Mamiko, Aya (quien va para Perú en unos meses) y Megumi. Ante la pregunta de qué querían aprender, la respuesta fue demasiado nebulosa: español práctico. Igual, revisamos algunos detalles y terminamos a eso de las 18:30. Mamikoo se quedó más tiempo y cuando me despedí de ella, problema, ¿en donde dejé mi bicicleta? En esas estuve como 15 minutos, dando vueltas por todo lado, hasta que finalmente la encontré. Tengo que poner más cuidado con eso, pero dado que es la primera vez que me pasa, podríamos decir que más bien me ha ido muy bien. Ser como yo es problemático.

Me quedé leyendo el capítulo 2 para el Nihongo Jijou y me acosté en la madrugada, sin haber terminado.

El viernes (25) todo fue bien. Me encontré a Mamiko y fuimos a comer. En la tarde, el curso estuvo interesante. Estaba muy forzado con los archivos necesarios para mi presentación en la clase de la profesora Sueyoshi del miércoles, pero primero tuve que ir con Alexia a mostrarle en dónde quedaba la iglesia de Mine.

Regresé al shiryoushitsu. La tarea fue complicada, tuve que revisar cual material tenía a mano y ver cual era el mejor para enviarlo a mis compañeros para que lo leyeran. Terminé enviándolo muy tarde pero muy especificado. Muy a lo Rony, lento pero bien hecho. Después de eso me quedé preparando lo que el profesor Kurihara me pidió, pero imposible, no logré terminarlo, pues quería terminarlo ese mismo día. Me fui para la casa tarde y terminé acostándome también muy tarde.

El sábado estuve preparando el documento, me puse a hablar con Ata y luego con la casa y terminé enviando el documento, tras tomar muchas decisiones importantes, como a las 15 horas. De momento, elegí aplicar para la maestría en estudios de intercambio internacionales y le envié una lista de temas en los que ocupo mejorar para la aplicación. Tras comer, me di cuenta de que no habían refrescos ni pan, lo que es un gran problema que pone en riesgo la vida para un panívoro, pero descubrí un problema más grande todavía: no encontraba mis llaves (por llaves llámese: la llave del apartamento, la de la bicicleta y la del shiryoushitsu). Tras durar horas buscándolas, me di cuenta de que las había dejado por fuera de la puerta, metidas en la cerradura. Repito, ser como yo es difícil. Fue por eso que pude ir a Beishia hasta a eso de las 19 horas.


Regresé y empecé la compilación de fotos de mi primer mes en Japón, que planeaba poner en facebook. A eso de la 2, falló el servicio web y tuve que cortar la tarea hasta el otro día.

Hoy (domingo 27) fui a misa, fui luego a K's Denki a comprar una máquina de cortar pelo (me salió como en 3 mil en, unos 16 mil colones). Me enteré de que un dúo llamado i-nos estaría en concierto en Bell Mall y fui. La primera parte del concierto se la transmití a mi familia por Skype y escuché el resto, en total unos 40 minutos. Les compré el nuevo single y me retiré. Tras cocinar y almorzar, me puse a acomodar el apartamento, que ha resultado ser algo en lo que gasto la mitad de mi tiempo. Como eran las 18, fui al campus Youtou a jugar Badminton con mis relucientes raquetas nuevas. Nadie llegó. No sé qué pasó, pero me devolví al apartamento, comí y me puse a limpiar nuevamente (¿ven?). Finalmente, terminé la limpieza, terminé lo del facebook y finalmente, actualizo con esta entrada mi blog.

jueves, 24 de abril de 2014

Mi primera matrícula y traduciendo textos

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Miércoles 23 de abril (2014):

Ayer estuve muy ocupado y no pude escribir, así que voy a intentar resumir lo que ha pasado durante estos dos días.

Ayer tenía planeado estudiar al menos 8 horas, por eso me levanté temprano, pero a final de cuentas terminé saliendo tarde para la U. Como estaba como chiquito con juguete nuevo y la hora lo permitía, fui caminando hacia la U con celular en mano y decidí contactar a la familia por Skype.

Quería hacer la matrícula ese día, así que tras mostrarle a mi gente parte de la U usando mi flamante cámara web, me dirigí al edificio de asuntos internacionales (ese no es el nombre, pero como no me acuerdo bien, así le he puesto siempre). Al llegar, me di cuenta de que no andaba las hojas de la matrícula, lo que me hizo devolverme hacia el apartamento, que por dicha está como a 400 metros. Esto lo aproveché para mostrarle a mi gente cómo es la calle por la que transito todos los días y cómo es el edificio en que vivo, pues siempre lo han visto por dentro nada más.

Debido a este error, decidí llevarme la bicicleta, solo por aquello de que volviera a meter la pata y tuviera que devolverme. Es decir, por si las moscas.

Primero pasé al shiryoushitsu para revisar bien lo de los cursos y por casualidad me puse a revisar mi agenda. ¡Santo! ¡Si ayer tenía una reunión! Por estar con la compra del celular, se me había olvidado completamente la primera de las tres sesiones de preparación para el International Communication Seminar (que de ahora en adelante voy a llamar ICS). Resulta que el ICS es una actividad de las que llaman gasshuku, es decir, un taller en que se duerme afuera, en este caso, es en un hotel de Utsunomiya y salimos el viernes y regresamos el domingo. No recuerdo bien la fecha pero es en mayo. Ya había asistido a la reunión informativa, pero era necesario ir a las tres sesiones de preparación para poder asistir, y la primera... fue ayer.

Esto cambió mis planes, tuve que dejar de lado la matrícula y ver cómo hacía para hablar con los organizadores. Otro detalle era que recordaba que había que pagar ese día, así que necesitaba confirmar si podía participar para pagar. Gran problema. Estuve buscando a dos de los profesores, ambos estadounidenses para disculparme y hacerles la consulta.

No hubo éxito. Tras darle vuelta a todas las oficinas, no logré encontrarles, así que decidí ir a imprimir un documento (por primera vez) y escribir un correo contando la situación.

En algún momento, me topé a Noor, una estudiante de Siria. Ella me dijo que había visto a los profesores arriba, así que fui a hablar con ellos. Minimizaron el asunto y me dejaron participar. Pagué y recibí algunas instrucciones. El papel que me tocará será asesorar a los otros participantes de mi grupo... en idioma. Interesante, por alguna razón y sin escuchar mis comentarios al respecto, me vieron cara de muy hablantín del inglés y mi rol será rotar y ayudar a que la gente diga lo que necesita decir. Interesante.

Terminado esto fui a imprimir las hojas, pero descubrí que aunque la universidad imprime una cantidad de hojas anual sin costo alguno por estudiante, es necesario llevar las hojas. Fui a la cooperativa de la U y compré 50 hojas tamaño A4. Todo en orden. Fui al laboratorio de la biblioteca por las impresiones, pero justo cuando iba a sacar las hojas para colocarlas en la impresora, descubrí que era algo como papel cebolla. Fallo. De nuevo a comprar hojas.

Por dicha me dejaron cambiarlas por las hojas que ocupaba y finalmente, pude imprimir las hojas. Terminado esto, tuve que ir a matricular los cursos. Algunas cosas no estaban como era necesario, así que tardé mucho en poner las cosas en limpio y terminar el trámite.

Cuando finalmente me senté a traducir textos, eran cerca de las 5 de la tarde. Tras varias horas, me di cuenta de que no era posible terminar. Ocuparía aproximadamente una semana al ritmo que iba. Vámonos para el apartamento. Calenté lo que tenía listo y cené. Fin del primer día.

Hoy me levanté temprano para el día en que tengo más cursos de la semana. Tras la exposición de Ri-san, la profesora Sueyoshi me dijo que fuera a hablar con Kurihara-sensei, quien posiblemente me podría aceptar en uno de sus cursos. Tras el curso de Yaeshima-sensei, decidí ir al quinto piso y logré dar con él.

Kurihara-sensei es un profesor recién llegado de sus estudios en Sri Lanka, es joven y tiene muchas energías. Me ofreció ir a su curso de pregrado, pero era el día de hoy, lo que me hacía imposible asistir pues ya tengo clases a otra hora. La otra opción que me ofreció fue ir a un curso del día de mañana. El asunto es que se había cerrado pues nadie lo matriculó. Tras consultar cómo funcionaría el asunto en mi caso, quedamos en que iba a tomar el curso.

En esta universidad, hay más profesores de maestría que estudiantes de ese programa, así que es común ver cursos con una o dos personas. De esta forma, yo me convertiría en el único estudiante de este curso. Interesante.

Continué con los demás cursos, y finalizado el último, decidí comprar una grabadora periodística e ir a buscar ayuda. Mi plan es el siguiente: como buscar kanji por kanji es tan lento, me ayudaría mucho si encuentro a alguien que me haga el favor de leer el texto, grabarlo y luego poder yo utilizar la grabación para traducir. Muy buen plan sin duda, soy un genio.

Mientras fui a un lugar que frecuento en busca de los compas ichinensei, me encontré a Matsubara Nana, con quien habíamos quedado de intercambiar conocimientos, yo le ayudo con su español y ella me ayuda con mi japonés. Fue perfecto, pues accedió a hacerme el favor de leer el texto para mí. El resto de la tarde y noche (me fui de la U pasadas las 23 horas), los dediqué a apoyarme en la grabación, mi diccionario electrónico, varios programas de software y mi propio conocimiento para poder traducir algo del material. No me fue muy bien pues solo terminé una página y eran como 4, pero avancé mucho más rápido gracias a la grabación de Nana. También estuve revisando algunas cosas en la máquina de la VRA que yo utilizaba antes mediante el Team Viewer.

Tras regresar al apartamento, terminé algunas cosas y escribí esto, por lo que me terminé acostando pasada la 1 de la mañana.

Balance: mi ritmo es pésimo, mi japonés está por mucho debajo del nivel que ocupo, estoy esforzándome bastante y estoy muy ocupado, pero como ya les he mencionado antes, creo que soy el estudiante más feliz de todo Japón. La gente de la U me ha tratado muy bien y he conocido a muchísima gente, tanta que mi pobre memoria produce overflows a cada rato. Gracias al celular, ahora tomo fotos a cada contacto para apoyarme con el reconocimiento. Creo que lo único mal es que mis manos están muy deterioradas por el aire frío y a veces se han roto un poco.

Disculpen tanto texto, pero había que contar mucho. Fin por hoy.

martes, 22 de abril de 2014

Finalmente, tengo celular

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Lunes 21 de abril (2014):

Anoche descubrí que se me había hecho una vejiga por jugar badminton. Como tenía que caminar mucho hoy, quería poder usar mi bicicleta.

Como parecía que no iba a llover fuerte, tomé mi bicicleta para ir a clases al campus Youtou. Tras las lecciones, fui a Ito Yokado para finalmente comprar mi celular.

Llegué a una tienda a eso de las 13 horas. Tras preguntar detalles, decidí comprarme un Samsung. El muchacho que atendía se sorprendió un poco, así que asumo que inicialmente no me vio con mucha cara de que fuera a comprarles algo. Tras llenar todo y presentar los miles de documentos que piden para un contrato telefónico, me pidió que regresara en 30 minutos. El asunto tardó mucho, mucho más, lo que me dio tiempo de ir a Daiso, comer donas, taiyakis, comprar accesorios para el teléfono y más. Con contarles que salí con el celular en mano a eso de las 17 horas, lo digo todo.

Pasé luego a K's a comprar un estuche para el diccionario electrónico que me regalaron y de ahí para la casa.

Después de cocinar y comer, me puse a revisar el teléfono y sus opciones y en eso se me fue el resto del día. Mañana tengo que estudiar al menos 8 horas, esa es mi meta.

Hasta mañana.

domingo, 20 de abril de 2014

Huevos de Pascua (domingo de Resurrección)

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Domingo 20 de abril (2014): Domingo Santo

Tras la celebración de las 09:30 en Mine Kyoukai, repartieron huevos de Pascua (primer vez en mi vida que los veo) y luego fui a la comida a comer con todos.

Había un gran variedad de comida y conocí a mucha gente. Estoy contento de que haya comunidad católica en esta ciudad. Nuevamente, me hicieron presentarme y tras terminar, fui en bicicleta hasta D2, a comprarme otra de las cajas que compré ayer.

El plan era terminar de lavar la ropa, ordenar el apartamento y finalmente, clasificar la basura para empezar a disponer de ella en cada uno de los días designados, así que me tomé esto en serio, pero no terminé antes del badminton de las 18 horas (que estuvo muy divertido).

Tras regresar, pedí más instrucciones a Rosario sobre cómo clasificar y le entré al asunto. Gran parte de la basura que tenía, será recogida mañana mismo.

Como estaba muy sudado, me bañé y me acosté a eso de las 23:30.

sábado, 19 de abril de 2014

Sábado Santo y horas por Skype

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Sábado 19 de abril (2014): Sábado Santo

Hoy tuve la oportunidad de hablar con la familia durante horas. También, por primera vez hablé con tío Juve y Nidia. Al mismo tiempo, finalmente usé la lavadora a gran escala.

El día estuvo más soleado en la mañana, pero cuando finalmente terminé de hablar con mi gente y fui a tender la ropa, el tiempo había enfriado bastante y habían amenazas de una llovizna.

Comí tarde y fui a una tienda grande llamada D2, a comprar un paño y unos contenedores plásticos para ordenar el carnaval del apartamento. Me di cuenta de un aspecto muy oscuro de mi personalidad: me gusta comprar. Estuve unas dos horas viendo cosas y aunque intenté comprar lo menos posible, terminé comprando otras cosas que no tenía en los planes. Al menos, creo que son cosas necesarias.

Como no andaba mi reloj, llegué al apartamento más tarde de lo que pensé, por lo que terminé llegando 4 minutos tarde a misa de 7 de la noche en Mine kyoukai. Todos ya tenían encendida la vela y la celebración había iniciado. Hoy lo olvidé, así que voy a tener que preguntar mañana cómo inició la celebración, pues en Costa Rica se hace una hoguera, a partir de la cual se enciende la vela y la celebración inicia. ¿Cómo hacen aquí? Tendré la duda hasta mañana.

Llega al apartamento, cociné y empecé a ordenar, pero no logré terminar. Mañana planeo ir a misa de 09:30, después de lo cual estará una comida por Pascua.

viernes, 18 de abril de 2014

Un día distinto: bastante frío

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Viernes 18 de abril (2014): Viernes Santo

Es curioso cómo puede cambiar la temperatura en este país. El día que llegué creo que fue el más frío, incluso había granizado. Poco a poco fue calentando y estos dos o tres días, ya estaba calentando más de la cuenta. Al abrir los ojos hoy, me encontré un día muy distinto: cielo gris, lloviznas suaves y mucho frío. Compárenlo con lluvia en el Cerro de la Muerte. En todo caso, me gusta este tipo de clima, pero tiene sus inconvenientes. Por ejemplo, hoy usé la bicicleta hasta en la noche, para poder ir a misa y de compras.

En la mañana salí para el curso de conversación. Nos dejaron una tarea interesante: buscar gente para practicar un texto. Buen curso, pero tengo que estudiar bastante.

Me retiré hacia el shiryoushitsu y ahí estuve unos minutos, probé las copias de la llave que saqué, fui a comer y luego a clases con Morrison-sensei. Ese curso se ve interesante, hoy solo teníamos que haber traído el capítulo uno leído y revisado. Realmente creo que voy a disfrutar mucho este curso.

Tras esto fui otra vez al shiryoushitsu, ahí estuve usando el denshi jisho para traducir el material de Shigeta. Esto es mucho más rápido que a como lo estaba haciendo, pero sigue siendo un trabajo lento.

Tras ir a la celebración en Mine kyoukai, fui a Beishia a compra de líquidos y vegetales, que aquí son muy caros.

De regreso al apartamento, me conecté al Skype y logré ver a Ata, Douglas e Irene un buen rato, pero la comunicación fue por texto, pues aquí era tarde y podía molestar a los vecinos.

Tras escribir esta entrada, cierro el día. Espero poder comunicarme con la familia durante gran parte del día de mañana, que en Costa Rica será todavía Viernes Santo. Estaba pensando en ir a Nikkou, pero prefiero quedarme precisamente por ser Semana Santa. Primero lo primero.

Esta gente es sorprendente

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Jueves 17 de abril (2014): Jueves Santo

En la mañana fui a limpiar un poco el shiryoushitsu y a partir del medio día tuve la segunda clase con Shigeta. Creo que entendí un 1% más que la anterior, pero algo es algo. Tras la clase, me reuní con los compas ichinensei. Ellos me dijeron que es un curso duro, entienda o no el japonés... por dicha no lo tengo matriculado.

Le pedí a Yoshi que me enseñara a usar el denshi jisho (diccionario electrónico) que me prestó desde un día de estos. El aparato era mucho más carga de lo que pensé y a final de cuentas, Yoshi terminó regalándomelo. Esta gente es sorprendente.

Tras un rato hablando con ellos, terminé hablándoles un poco del español, pues algunos de ellos están llevando un curso introductorio de este idioma. Como tenía que ir a sacar dos copias de una llave y el plan era ir hasta JR Utsunomiya eki (la estación principal de tren), Taiga, otro de los ichinensei, me dijo que conocía un lugar mucho más cercano y se ofreció a llevarme. Esta gente es sorprendente.

Tuve que esperarlo a que terminara una clase y Tsubasa también se apuntó a ir con nosotros. El lugar era amplio y ciertamente, mucho más cercano que donde pensaba ir inicialmente.

Como es jueves Santo, se regresaron conmigo a Udai y también fueron a ver donde quedaba Catholic Mine Kyokai. Tras la misa, me regresé al apartamento y me cociné una receta original, que sinceramente no me quedó muy bien. Tenía varias verduras, pero, el sabor no era como esperé, aunque se dejaba comer. Yo también soy sorprendente.

Mañana tengo relativamente poca carga, así que será un día tranquilo. En mi mente se gesta la idea de ir el sábado a Nikkou, la ciudad turística más famosa de la prefectura donde vivo e importante para todos, pues además es Patrimonio de la Humanidad desde 1999.

Termino como otras veces: veremos qué tal.

miércoles, 16 de abril de 2014

Miércoles de muchos cursos

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Miércoles 16 de abril (2014):

Los miércoles son los días más ocupados pues tengo varios cursos.

En la mañana tuve la primera reunión con la gente de mi laboratorio. Conocí a la muchacha china y al peruano. A la muchacha de Malasia ya la había conocido anteriormente. Lo que hicimos fue presentar brevemente nuestros temas de investigación. A partir de la próxima semana vamos a empezar con presentaciones más completas.

De ahí fui a un curso de japonés con Yaeshima-sensei (el mismo señor que me da el curso del viernes), que hasta donde he podido ver, sin exagerar, se nota que ama la educación, tiene paciencia y explica bien, aunque me han dicho que los cursos con él son duros.

Para ir al próximo curso tenía el receso de almuerzo, pero como quería saber si Shigeta había recibido un correo, decidí visitarlo.

A Shigeta le he escrito dos correos: el primero pidiéndole el material en digital para poder traducirlo y anoche otro correo, avisándole que no iría a su seminario pues había preferido tomar un curso de japonés.

En cuanto entré no me dejó explicarle y empezó a decir que estaba muy ocupado y que tenía muchas reuniones y muchas cosas que hacer y blah blah blah. Yo no entendí de momento, así que hice a retirarme. Como vi que no se callaba, me detuve para ver que era el asunto. Al rato de escucharlo en lo mismo, me cayó que era que pensó que venía por el material (lo que le había pedido en el primer correo y que ya no me importaba), así que procedí a intentar explicarle que no iba a venir a la clase y pareció molestarse mucho, con lo que confirmé que el pedazo de bateador no había leído el segundo correo. En todo caso, aquí uno no les discute a los profesores, así que en cuanto tuve la oportunidad, me despedí y me retiré. Este profesor será el encargado de revisar mi tesis. Mmm...
 
Me retiré con buen tiempo para el siguiente curso, por lo que llegué muy bien (el curso es en el campus Youtou y tardé aproximadamente 10 minutos en bicicleta y a un paso entre regular y lento. El curso es de japonés también y se nos incorporó una compañera de Laos llamada Damon (o algo así, no recuerdo bien), con quien sumamos tres estudiantes.

De regreso me apresuré un poco pues tenía un curso en el campus Mine. El curso se llama taagengo communication y se ve interesante, aunque más de 120 estudiantes asistieron hoy. El profesor es una joya y se apellida Yoshida.

El que no hubiera tenido que ir al seminario de Shigeta me alivianó mucho el día.

Terminado este curso me fui para el shiryoushitsu (el aula en donde me he quedado estas tardes y noches) para trabajar en varias cosas. Empecé a traducir el material de Shigeta, pero tras dos horas el método que uso es demasiado lento y a eso de las 22 horas, decidí retirarme para el apartamento.

Hoy fue el día más caliente de los que he pasado aquí en Japón. Temo que el legendario verano japonés se acerca a pasos agigantados. Temperaturas de hasta 38 o 39 grados con muchísima humedad se acercan.

Fiesta de bienvenida

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Martes 15 de abril (2014):

Hoy me había propuesto a usar la lavadora por primera vez (he estado lavando pocas cosas pero a mano), pero el tuvo que se supone la llenaba, no funcionó, así que tuve que intentar hablar con la casera, aunque finalmente no lo logré.

Fui a la universidad tras el almuerzo. A las 15:00 fue una reunión en que nos guiaron con cosas importantes para los ryuugakusei. Fue interesante que fue la primer charla en la que casi me duermo. La señora la hizo sumamente aburrida y tanto la charla como el material escrito, estaba íntegramente en japonés, así que importante o no, no me voy a poner a revisar ni papa.

Después de eso fue la fiesta de bienvenida a los estudiantes extranjeros, de parte de la misma universidad. Muy buena comida y conocí mucha gente. Otra vez. Este ha sido un constante de casi todos los días. Abrumadoramente, los estudiantes extranjeros en esta universidad vienen del continente asiático. Con la excepción de un muchacho de Perú, una compañera de México, otra de los Estados Unidos, un eslovaco (o eslovenio, ya se me olvidó) y yo, todos son de este continente, habiendo muchos chinos.

Como mañana es la primera reunión con la gente de la profesora Sueyoshi, me quedé en la U hasta casi la media noche estudiando mi propuesta y terminé acostándome a la 1 de la mañana pasadas. Mañana tengo clases casi todo el día, así que será el día más pesado de la semana. Es todo por hoy.

lunes, 14 de abril de 2014

Mi primer yakisoba

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Lunes 14 de abril (2014):

Hoy me dirigí hacia el campus Youtou con buen tiempo, con el objetivo de hablar con Igawa-sensei o con su jefa, Horyo-sensei y ver si me podían dejar en un curso de "Jissen Nihongo" (japonés práctico). Por  suerte di con Igawa-sensei de inmediato y esperamos mientras llegaba el otro estudiante, un chino para variar.

En esta universidad al menos hay una situación interesante: hay más profesores que estudiantes, así que no es de extrañar que hayan cursos con dos o tres estudiantes. Incluso, creo que si alguien quiere llevar un curso, el mismo debe abrirse, aunque sea con un solo estudiante. Interesante. Japón no deja de sorprenderme.

Tras hacernos el examen de ubicación, que el chino terminó mucho más antes, la profesora nos entrevistó para ver que tipo de curso nos daba. Mi compañero tiene un japonés oral pésimo, aunque debe tener mucho mejor japonés escrito que el mio.

Terminado este curso (que será también los días miércoles), fui a Beishia y luego a cocinar. Hice por primer vez yakisoba, que recién comí por primera vez en mi vida el día de ayer, así que recordaba perfectamente bien más o menos a qué tenía que saber. El resultado final fue bueno, aunque temo que estoy comiendo demasiado, a esa conclusión llegué tras ver mi almuerzo. Si a eso le agregamos que estoy tomando refrescos y leche al por mayor, creo que voy por mal camino, así que voy a tener que desacelerar un poco o voy a quedar como Pikachu de redondo.

Tras esto fui a Mine para usar la sala de la profesora Sueyoshi, ahí estuve el resto del día hasta tarde, acomodando el carnaval de documentos que tengo y finalmente revisando el catálogo de hardware de la profesora, para ver si ponemos un router inalámbrico.

Día tranquilo pero provechoso. Como mañana no tengo clases, espero poder avanzar bastante con lo que tengo que hacer para cada curso, también en la sala de la universidad. Que pasen bien.

Mi primer misa en japonés y mucho ejercicio

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Domingo 13 de abril (2014):

Aunque pensé que más o menos sabía en donde quedaba Matsugamine kyoukai (el único templo católico de Utsunomiya), me fallaron los cálculos y me perdí un poco, lo suficiente para llegar a las 10:15 a la misa de Ramos. Ni modo, en todo caso, la misa fue larga, así que no me perdí de tanto.

Tal y como dice el título, esta es la primer misa a la que asisto en japonés, pues aunque es mi segunda misa en esta iglesia, la anterior fue en inglés. En general, fui capaz de entender qué estaban haciendo y de qué trataban las lecturas, pero preferí de todas formas tomar una hoja con información en inglés para seguir mejor la celebración. La misa tiene algunas diferencias con las que he asistido en el pasado, pero creo que más adelante escribiré una entrada exclusivamente sobre esto.

Tras finalizar la misa, me encontré con un señor de apellido Nakajima, quien me invitó a la práctica del coro, así que terminé hablando con una señora de apellido Uki para poder entrar. Estuvo interesante, se la toman muy en serio y cantan muy bien, además de que conocí a algunos japoneses católicos, lo que es muy bueno, debido a que esta es mi nueva parroquia. También conseguí el horario para las celebraciones de esta Semana Santa: jueves, viernes y sábado a las 19 horas y el domingo igual, a las 10 de la mañana.

Para evitar problemas en el futuro, visité luego todos los alrededores para asegurarme de que no me voy a volver a perder. Visité un lugar llamado Orion dori (no sé si es con "o" larga o no), que es una especie de boulevard bajo techo con muchas tienditas a los lados. Ahí tenían el "Haru no Inshoku Hanami Matsuri", que a grandes rasgos significa algo como "Festival de Primavera de comida y bebida de Hanami", así que me quedé por ahí y comí el primer yakisoba creo que de mi vida.

Tras conocer y reconocer bien el sitio, fui a buscar la Minami Utsunomiya Eki, que jamás había visitado, para asistir a una exposición de arte de Julieta, la argentina. Eran pocas obras, pero me gustó, pues se ve que es de alguien que realmente sabe lo que hace y de paso, conocí otra parte de esta ciudad.

Como también Rosario me había invitado a ir al campo Youtou a jugar badminton, salí tempranito hacia el apartamento. En el lugar conocí a muchos ryuugakusei y la pasé realmente bien. Jugamos en el gimnasio mayoritariamente sin reglas y estuvo bonito, además de que fue mi primera vez jugando ese deporte. Creo que a partir de la otra semana, cuando empiece la vida seria, será una buena solución para el estrés.

Sigo sumando kilometraje con la que ahora es mi eterna compañera: mi bicicleta. Hoy me pasé dando vueltas en ella y encontrando lugares, calculo que al menos unas 2 o 3 horas. Como tiene tres cambios, normalmente la ando en la más dura para hacer más ejercicio. Creo que sigo usándola, mis piernas se van a hacer como el doble de gruesas. Como en la noche, además estuve "jugando" badminton, hoy es el día en que he hecho más ejercicio en Japón y en que he sudado más.

Terminada la actividad me preparé una sopa que no quedó tan bien como esperaba y luego me bañé. Todo en orden y hasta aquí el fin de semana.

sábado, 12 de abril de 2014

Lluvia de pétalos, visita a Shouunji y Futaarayama jinja

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Sábado 12 de abril (2014):

El día de hoy les ofrezco más fotos, debido a que visité lugares realmente bonitos.

Estaba muy cansado y en cuanto me levanté, me conecté a Skype y logré hablar con la gente redonda y vacilona, pero como estaban por recibir a la gente de un Vía Crucis y tuvimos que cortar.

Fui a una compra rápida a Beishia y luego por el Bell Mall para buscar una Denkiyasan (tienda de electrónicos) y ver si podía comprarme un denshi jisho (diccionario electrónico que requiero de fijo) y me entretuve muchísimo con las alpacas de ahí (sí, tienen una familia de alpacas donadas por el gobierno de Perú), luego conociendo los alrededores de Ito Yokado. Había gente en otro hanami y aproveché para comprarme mi primer takoyaki (500 en) que no estaba como esperé y se desarmaba fácilmente. Ni modo.


Aunque tardé mucho más de lo deseado, pude disfrutar de un fenómeno interesante de esta época y que he estado sintiendo hace algunos días: la lluvia de pétalos de sakura. Todo el día de hoy estuve en lugares en donde caían continuamente pétalos de esta flor y en donde además habían ya muchos pétalos en el suelo, en ocasiones formando una especie de alfombra. Hermoso y relajante.

Tras entregar un encargo en Meihou-sou (edificio en donde vivo) y darme cuenta de que ya era muy tarde (creo que eran las 14 horas pasadas), tomé un mapa y me decidí a visitar los lugares planeados: Shouunji (templo budista) y Futaarayama jinja (templo shintoísta), lugares que quería visitar antes de que los sakura perdieran sus flores por completo.

Logré encontrar el camino correctamente y fui directo a . Ya otro día había visitado este sitio, pero estaba pendiente la visita al estilo Rony: lenta y pacientemente, sacando muchas fotos en el proceso.

Empecé por el cementerio, el cual es mucho más grande de lo que esperé. Tienen también un árbol de sakura que según la historia fue sembrado entre el 1655 y el 1656 y muchísimas estatuas de piedra, entre las que sale una especie de Buda (disculpen mi ignorancia) de unos 2.5 metros de alto, incluyendo la base.

Tras terminar ahí, Rony (mi inseparable compañero) y yo, fuimos al Futaarayama jinja, un templo shintoísta. Más precisamente, fue mi primer visita a un jinja.


Más que contarles, decidí dejarles las imágenes. Espero les hayan gustado.

De regreso decidí desviarme un poco y conocer mejor la zona cercana a JR Utsunomiya eki (la estación de tren a donde llegué mi primer día).


Al llegar a la casa, cociné por realmente por primera vez desde que llegué a Japón, pues ocurre mucho que como afuera o cualquier cosa. El menú: sopa de miso con zanahoria (versión Rony) y arroz japonés frito (también versión Rony). Estuvo bien bueno a final de cuentas y que dicha porque fue la cena-almuerzo, que por los enredos, no había podido hacer antes.

Este día fue muy interesante pues viví muchas cosas nuevas, algunas de las cuales solo las había visto en películas o series. Mañana voy a estar ocupado con cosas extra-univesidad, pero creo que se trataría de posiblemente el último día, pues a partir del próximo lunes tengo asignaciones académicas.

Todo por hoy.

Explorando cursos

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Viernes 11 de abril (2014):

Hoy tenía un objetivo muy claro: asistir a tres cursos distintos y ver si los respectivos profesores me permitían entrar en ellos. He aquí los resultados:

Primer curso: Chokkai to kaiwa (escucha y conversación), profesor Yaeshima, de 08:50 a 10:20: Solo hay tres personas: un chino, una china y yo. Curso interesante y me parece que muy útil, además de que me parece que el nivel es más o menos lo que ocupo. Pedí permiso y el profesor me permitió quedarme. Veremos que dice la administración.

Segundo curso: Sakubun A (composición A). Lo impartía también el profesor Yaeshima y el horario es de 10:30 a 12:00. Él me dijo que como soy un kenkyuusei (estudiante de investigación) no puedo llevarlo. Fin del asunto.

Tercer curso: Nihonjijou (asuntos de Japón). Impartido por la profesora Morrison (estadounidense con japonés fluido y de alto nivel) y de las 12:50 a las 14:20. Habla parecido a como lo hago aquí, mezclando idiomas. Ella me dejó quedarme y es genial. Es en inglés-japonés y es sobre la cultura japonesa en general. Son casi 30 estudiantes, ninguno japonés y se van a hacer viajes y excursiones cortas a sitios históricos cercanos. Genial. Veremos que dice la administración.

Mientras estaba esperando el tercer curso, los compas ichinensei llegaron y estuvieron conmigo un rato, tras el cual fuimos a comer a la soda de la U.

Terminado el tercer curso me fui a dar un tour en bicicleta por el campus Mine, cosa que estaba pendiente desde el principio. Tras sacar muchas fotos me fui para el apartamento. Fui de compras pero me dio tarde en Bell Mall y no pude comprar un encargo de Rosario-san.

Mañana los planes son visitar lugares aquí en Utsunomiya. Ya es tarde, así que a dormir.

viernes, 11 de abril de 2014

Primera clase como oyente y cena con mi tutora

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Jueves 10 de abril (2014):

Hoy tenía la primer clase como oyente con el profesor Shigeta, pero era hasta las 12:50 en el aula 1351 del 4goukan (edificio 4, tercer piso). Como había un curso de japonés a la misma hora, los planes eran ir a hablar con el profesor Shigeta con buen tiempo e indicarle que era mejor para mí ir al curso de japonés y luego asistir a ese curso, pero como no conocía el aula (no estaba indicada), tenía que ir antes con Kurosawa-san, para ver si ella me podía ayudar.

Como tenía toda la mañana, fui a devolver las cosas prestadas (la arrocera a Rosario y la cortina y las llaves de la bicicleta a Tyo) e invité a Rosario al apartamento. Rosario me contó su experiencia con los cursos de japonés y nos dio tarde hablando, así que no pude ir al supermercado ni almorzar antes de ir a clases.

En todo caso, fui temprano para primero ir con Kurosawa-san, quien no me pudo ayudar con la clase, pero tenía buen tiempo para llegar a la clase de Shigeta, a donde decidí finalmente asistir.

Al llegar al aula, los estudiantes me indicaron que ese curso no era de el profesor Shigeta sino de japonés. Eso me sorprendió mucho y estuve un rato por la zona preguntando. No debía haber error, puesto que el propio Shigeta me indicó el día anterior dónde era el curso. Al no ver cómo podía resolver el asunto, fui a ver si la profesora Sueyoshi estaba, encontrándola por dicha. Ella me indicó inmediatamente que el profesor la había llamado para indicarle que habían cambiado el aula y como no sabía mi teléfono, la llamaba a ella para indicarle que me avisara. Esto de no tener celular aquí es un verdadero problema.

Ni modo, tuve que ir ahora a la clase 1254, con la intención de disculparme con él y ver si me dejaba entrar. A final de cuentas, esta vez no era mi culpa. Al llegar, me encontré con el aula completamente llena, con gente incluso afuera del aula, así que simplemente me quedé por ahí, escuchando la primera clase.

La presentación usaba muchísimos kanji y el profesor usaba japonés de verdad, así que como podrá entender, no entendí más que el 10 o 15%. Al terminar la clase hablé con el profesor y él pareció entender bien la situación. Me invitó a ir a las discusiones de su laboratorio los miércoles a las 14:30, en donde tiene a dos estudiantes, ambos chinos. Veremos qué tal.

Terminado esto fui con la profesora Sueyoshi e intenté hacer un horario preliminar para discutirlo con ella. Aquí la matrícula es extraño, las clases empiezan y no se tiene matrícula, la cual se puede entregar como en las primeras tres semanas de abril, así que al principio reina el caos. En todo caso, ya tengo como un boceto para qué cursos llevar y qué hacer, así que ya es un primer paso.

De ahí vi nuevamente a Julieta, una argentina que estudió en Utsunomiya hace algunos años y que conocí creo que ayer. Es amiga de la profesora Sueyoshi. Salí directo para Beisha, pues no tengo comida ya y luego tenía que regresar por la profesora Sueyoshi a las 18 horas para ir a comer.

La profesora me llevó a una parte de la ciudad que no conocía a un restaurante de lo más bonito que he visto en mi vida tipo buffet de comida japonesa, en donde comí un montón y hablamos largo y tendido sobre muchas cosas. Entre otras, necesito que el Espíritu Santo baje para tener un buen tema para el doctorado y pronto, pues el que tengo creo que no me va a servir. Tengo que hacerle mucha cabeza, hablar con mucha gente y leer muchísimo en los próximos días.

Salimos del restaurante a eso de las 22:10, pero llegué a eso de las 23 horas al apartamento, pues en un tiro me perdí y agarré para donde no era.

Día interesante, sin duda. Llevo ya tres tardías, aunque la de hoy realmente no fue mi culpa, eso lo garantizo.

miércoles, 9 de abril de 2014

Empieza lo serio: reunión (dormitorio) y examen de ubicación

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Miércoles 9 de abril (2014):

A partir de aquí, es posible que no escriba a diario, a menos de que cuente con suficiente tiempo libre o que hayan cosas importantes que reportar.

Ayer hubo una reunión en el dormitorio de la U. Asistí pues me dijeron que era importante pues la policía iría a dar charlas interesantes.

La charla era a las 15:00, pero me equivoqué porque pensé que la reunión era en Udai. Cuando me di cuenta tuve que ponerle, pues ni siquiera conocía bien el camino. Tras mucho sobresalto, terminé llegando como a las 15:07, es decir, tarde. Mi primer llegada tardía en Japón. Lamentable.

Los policías hablaron de la seguridad como ciclistas y de qué hacer en caso de riesgos o robos. Realmente esta gente me sigue sorprendiendo. No he visto gente más creativa que los japoneses, sin duda, ustedes vieran cómo hicieron la charla. Pulgares arriba.

Siguieron otras charlas que no eran tan importantes y un yonensei (estudiante de cuarto año) nos invitó a la kangeikai (fiesta de bienvenida) para estudiantes de la Facultad de Estudios Internacionales. La entrada costó 500 y fue a las 18:00, pero lamentablemente cuando llegué casi no quedaba comida. De todas formas estuvo interesante, pues se podía conocer mucha gente, aunque la mayor parte de gente que conocí, realmente querían practicar inglés, así que ni modo, a hacerle al inglés.

Hoy tenía el examen de ubicación de japonés a las 10:00, pero por confiarme, llegué como a las 10:03. Lamentable. Dos tardías en dos días. Esto me está preocupando, especialmente porque siempre estoy seguro de que no voy a llegar tarde y termino haciéndolo. Habrá que tomar medidas drásticas.

Fui a comer en soda de la U y luego a otra reunión a las 13:30 (a esta no llegué tarde, je je). Ahí nos separaron por los resultados de los exámenes de japonés en tres grupos: "no saben ni papa", "más o menos" y "qué cargas". Lamentablemente, y contrario a todo lo que esperé, de acuerdo a mi examen estoy en la categoría de "no saben ni papa". En todo caso, tras hablar con ellos me dejaron quedarme en el grupo de "más o menos", que realmente tiene un nivel mucho más alto que el mío, así que a ponerle.

Tras terminar la reunión de orientación, realmente quedé con más dudas que respuestas, así que fui a visitar a la profesora Sueyoshi, quien muy amablemente me aclaró la enorme nube de dudas que tenía en frente. Tras esto, me pidió que fuera a hablar con el profesor Shigeta, quien será el revisor de mi tesis cuando esté en maestría. Éste me va a permitir ir a sus clases para mejorar mi nivel de conocimientos. Estos cursos son en japonés, así que posiblemente no voy a entender mucho que digamos, pero eso es lo que se llama "mandarse a la pista", de lo que soy muy partidario.

Como quedé con mucho material pendiente, me fui para la sala de investigación de la profesora Sueyoshi para ordenarme un poco, pero a final de cuentas terminé trabajando en varias cosas, incluyendo esta entrada en mi blog y salí de ahí terminadas las 22 horas.

En todo caso y aunque está por iniciar una etapa distinta a la anterior y mucho más seria, la recibiré con los brazos abiertos.

martes, 8 de abril de 2014

Día de trámites y compras

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Lunes 7 de abril (2014):

Hoy José pasó por mí como a las 09:10 para terminar trámites y me acompañó prácticamente todo el día.

Hicimos muchas cosas. Un resumen:
  • Reportamos mi residencia al shiyakusho (es como la municipalidad).
  • Fuimos al yuucho ginkou (JP Bank) a cambiar dólares.
  • Fuimos a Udai, comimos en la soda, se activó mi tarjeta para poder usar las computadoras de la U y otra guía general.
  • Fuimos con Kurosawa-san pues a las 15 horas venía un funcionario del banco para abrir mi cuenta bancaria.
  • Fuimos a comprar bicicleta (sí, finalmente tengo mi propia bicicleta). La compramos en D2, como a 800 metros de mi apartamento.
  • También en D2 compré un set de futon, una mesita, almohadones y demás.
  • En Paradaisu, tienda de segunda mano, compré una olla arrocera y una cocina de gas.
 El resto del día intenté acomodar todas las cosas y usé la cocina por primera vez.

Me siento especialmente agradecido con José pues me dedicó todo el santo día.

Nuevamente, día exitoso. Como a las 10 me sentía enfermo, algo ocurrió y me sané completamente. Todo en orden.

domingo, 6 de abril de 2014

Vistazo de Utsunomiya

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Domingo 6 de abril (2014):

Tyo me consiguió una bicicleta y fui a desayunar con los compas de Indonesia y luego me llevaron con ellos por la ciudad.

Es la primer vez que tengo la oportunidad de ver la ciudad desde una bicicleta. Hay muchos lugares a los que tengo que regresar. Por ejemplo, pasé por fuera de un jinja y algunos edificios históricos u oficiales.

Nos equivocamos un toque y visitamos primero el campo del Shouinji, primer templo budista que visito y muy famoso por sus sakura. Muy distinto a todo aquello que había conocido y más adelante tengo que regresar para poder verlo en detalle.

Finalmente llegamos a Hachiman Yama, parque público que contiene, además de campos de sakura, campo de go kart, play para los chiquitos, ventas de comida y la Utsunomiya Tower, de 210 metros de altura.

Visitamos todo y subimos la torre. Costaba 190 en y se toma un ascensor a un segundo piso desde donde se tiene una muy buena vista de todos los alrededores. En un puesto me compré un ikayaki (es un calamar cocinado a la plancha y metido en un pincho), pero no logré terminarlo todo por dos razones: 1. era más duro de lo que creí. 2. me dio miedo que al ser algo tan rato a lo que no estoy acostumbrado, me enfermara por jugar de intrépido. El costo fue de 500 en.

Tras pasarla muy bien, le pedí a Tyo prestada la bicicleta, pues la necesitaba. Salí de ahí hacia Matsugamine, única iglesia católica de Utsunomiya. Era a la misa de las 14 horas, en inglés. Fue mi primer misa en Japón y me enteré que una misa que de vez en cuando la hacían en español, ya no lo van a volver a hacer. Posiblemente siga yendo a misa de las 10:00, que es en japonés.

Hice un recorrido tan raro, que la verdad vi de todo pero creo que en este momento no podría llegarle a casi nada fácilmente. Tengo que conocer mucho mejor esta ciudad. Descubrí muchos lugares que tendré que visitar detenidamente después.

Fue a Beishia y compré azúcar, sal y 10 kg de arroz. Al llegar a la casa estuve teniendo problemas con la olla arrocera pero me visitó José, el peruano que me ayudó el primer día y él sí le llegó, así que pude hacer mi primer arroz y comer bien rico, aunque sigo sin tener mi plantilla de gas. Será mañana,oficiales. pues voy a tener que hacer muchas vueltas pues Udai me lo está solicitando.

sábado, 5 de abril de 2014

El primer hanami

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Sábado 5 de abril (2014):

Hoy me levanté a eso de las 08:00, me levanté y mi bañé. Estuve acomodando el cuarto y luego logré hablar con mi gente más de una hora, tiempo suficiente para mostrarles bien el cuarto y explicarles mis vivencias.

Hoy conocía a una mexicana que vive a dos cuartos de distancia. Se llama Rosario y me dio algunos tips para compras y me prestó una olla arrocera que le sobraba.

Salí con Tyo hacia el campus Youtou de Udai, pues él tenía planeado un hanami con la gente de su laboratorio. Luego me ayudaría a comprar otras cosas.

Antes de llegar a Youtou pasé nuevamente la calle que tiene árboles de cerezo a ambos lados. Impresionante realmente, pues es algo que he querido ver hace muchos años.

El hanami en sí mismo es algo muy relajante. Los chiquitos juegan con sus familias, mientras la mayor parte de gente come a lo pic nic y toma fotografías. Tyo me presentó a su gente de laboratorio y a la comunidad indonesia. Muy amablemente me dieron comida y hablamos un buen rato. Algo incómodo es que como imaginarán sigo sin acostumbrarme a sentarme sobre mis pantorillas, así que al rato se me entumen las piernas. Otro problemita es que al rato el frío me llegó al corazón, por lo que necesité ponerme la jacket que andaba.



Tras el hanami, Tyo me ayudó a comprar cosas en el Ito Yokado y en el Bell Mall. Fuimos a una hyakuen shop (todo ahí cuesta 100 yenes) y compré la mayor parte de lo que me faltaba. El mall es muy interesante y posee muchas cosas lindas, incluyendo panadería en que me comí el primer taiyaki de mi vida.

Luego fuimos a Beisha y compré otras cosas, para llegar a la casa pasadas las 8. Un poquito antes descubrí una venta de yaki imo por fuera de los apartamentos y me compré uno. Con venta me refiero a un carrito que pasa con una canción a capella cantada por la voz de un señor mayor. Muy japonesa la tradición, sin duda. El costo fue de 250 en y a grandes rasgos, se trata de papa rostizada, que para nuestros efectos es una especie de camote grande: dulce, amarillo e incluso hasta fibroso.

Fue un muy buen día nuevamente y aunque me sigue faltando la plantilla de gas, estoy pronto a sentirme verdaderamente establecido en este apartamento. Mañana buscaré desesperadamente una misa y posiblemente pasaré un rato con los indonesios. Fin de la transmisión.

Mucho gusto, Sakura-san

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Viernes 4 de abril (2014):
 
Me levanté muy cansado pues casi no dormí, aunque las pocas horas que lo hice fueron en modo piedra.

Tras tener un desayuno tipo buffet, un breve recorrido por el frente del hotel y sacar algunas fotos, subí por el equipaje pues a las 10 enviarían a alguien por mí de parte de la universidad y no se les podía hacer esperar.

Estaba sorprendido pues son muy puntuales y eran las 10:15 y no había nadie, cuando como a esa hora llegó finalmente mi guía. Su nombre es José y es peruano y ha vivido en Japón unos 17 años, según me dijo.

José me llevó a la U y ahí conocí al famoso árbol de cerezo y a sus flores, llamadas sakura. Fue un momento mágico, pues son el signo de Japón y solo durante esta época están floreciendo. Ya en el Departamento de Asuntos Internacionales inicié varios trámites que estarán listos en unos días, tales como la apertura de una cuenta de banco con la oficina de correo. También recibí mi carné de universitario y muchas instrucciones.

De ahí José tenía que llevarme a hablar con la dueña de los apartamentos en donde iba a alquilar. Llegamos antes de la hora y estuvimos revisando todo lo que estaba en el cuarto, mientras yo aprovechaba para preguntarle cómo funciona cada cosa.

La administradora llegó pasado el medio día (se trata de Katou-san) y firmé el contrato con ella, lo que significa que voy a estar viviendo en ese lugar al menos un año. Los apartamentos quedan muy cerca de la U, pero algunos servicios faltaban de activar. José me llevó a dar un pequeño tour (general pero sumamente útil) por el campus de mi universidad llamado Youtou. En el que voy a estudiar se llama Mine.

Regresamos para que el señor de la empresa de gas me habilitara el servicio y tras explicarme cómo quedaba todo, me despedí también de José.

Justo cuando terminé de hacer una lista de lo que debía comprar, el cielo se puso muy pesado e inició mi primer aguacero en Japón, así que quedé en el cuarto, sin posibilidades de moverme. El aguacero se prolongó e incluso granizó muy fuerte.

Estaba muy cansado y me terminé quedando dormido durante al menos un par de horas. En cuanto se despejó, salí rápido de compras, buscando prioritariamente un paraguas, pues era parte del problema que tenía en ese momento.

Fui al supermercado Beishia y lo recorrí lo mejor que pude, con muchísima paciencia. La prioridad era conseguir una plantilla de gas, pero solo encontré plantillas portátiles, por lo que no pude comprarla todavía. Esta visita fue toda una experiencia pues muchas de las cosas comunes y corrientes no las logré encontrar, mientras que la variedad de productos y lo llamativo de cada uno fueron muy interesantes. Yo diría que al menos la mitad de todo lo que vi me era desconocido, pero disfruté muchísimo el rato.

Algo interesante es que pocas cosas vienen con el nombre en inglés y hay muchísimos productos asiáticos y desconocidos por nosotros. Tras pagar, tuve que pasar a Family Mart (uno de los famosos locales llamados “conbini”), pues había olvidado comprar paños.

Hay algunos puntos que quisiera recalcar:
  • En este momento hace más frío aquí que la temperatura récord en Costa Rica.
  • Caminar por las aceras es disfrutable, pero hay que tener un cuidado extremo con los ciclistas, pues aquí cuando se anda en bicicleta se debe andar por la acera.
  • La ciudad es tranquila y agradable y hasta lo que he podido ver, bastante plana, lo que la hace perfecta para andar en bicicleta.
  • Tal y como me lo imaginé, los japoneses me tienen miedo y los que me han hablado lo han hecho con toda la amabilidad del mundo, pero usando un japonés tan elevado que quedo abatido por estocada. Me falta aprender muchísimo y no puedo esperar para aumentar mi japonés.
  • Los sakura se pueden ver en varios lugares de la ciudad, de la cual he visto creo que lo más un 1%.
  • Todo me hace gracia y todo me gusta. Repito: estoy muy contento.
Al regresar al apartamento, comí algunas cosas que compré y salí a saludar al vecino de al lado, quien en la mañana me había hecho una propuesta para compartir el internet. Resultó ser de Indonesia, gente a la que le tengo mucho aprecio desde ISFiT. Su nombre es Agung Prasetyo, alias Tyo. Tras hablar con él un rato, me ofreció ayuda en todo pues ya tiene en Utsunomiya año y medio. Incluso, me prestó varias cosas y me obsequió algo de comida para el otro día. Me recomendó pedirle a Katou-san que me diera una plantilla, puesto que los otros cuartos cuentan con una por el mismo precio.

Para variar, terminé acostándome en la madrugada, muy cansado nuevamente, pero sumamente contento.

viernes, 4 de abril de 2014

Waku waku: la llegada a Japón

Utsunomiya, Tochigi, Japón. Jueves 3 de abril (2014).

Me desperté a las 07:00 hora local. Recuerden: la hora de Costa Rica es una hora más que la de Los Ángeles (para lo que sigue del día voy a seguir usando esa hora). A las 08:30 fuimos a comer a Subway nuevamente y tomamos el shuttle para el aeropuerto a las 10:20. Alrededor de las 11, entramos a la zona de espera para la salida del avión.

El tipo de cambio actual es de 90.25 yenes por dólar, así que procedí a cambiar $500, quedando con 45 mil en y tuve que pagar $0,7 de comisión.

La zona de espera está muy bien acondicionada y mantiene varios juegos de monitores enormes, evocando figuras asiáticas. Salimos a las 14:35, sin ninguna novedad.

Me tocó en el asiento 24J, entre dos japoneses: Shuuya (un koukousei) y Kawano-san (señor residente en Los Ángeles) y me la pasé hablando con ellos de vez en cuando. Cada asiento contaba con mucho espacio y entretenimientos. Yo en todo el viaje no dormí la gran cosa (calculo que si acaso, cabecée y caí cerca de unos 2 o 3 minutos) y aproveché para ver un par de películas japonesas: una sobre un combatiente Zero de la II Guerra Mundial y otra sobre un samurai cocinero y su historia real.

También aproveché para poder hablar con Verónica y Karla y levantarme del asiento un buen rato. Juntos estuvimos también hablando con una azafata japonesa, una señora de nombre Fukuda. Nos dieron dos comidas al estilo japonés y muchos frescos.

Un hecho importante es que estuve pendiente de cuando pasamos la Línea Internacional del Tiempo. Un momento eran las 18:44, y al siguiente las 15:44.

Llegamos al aeropuerto de Narita, Japón a las 13:40 (hora local: 16:40 pero del día jueves 3 de abril, para una duración total de 11 horas y 5 minutos). Aunque tenía planeado tomar el avión a Utsunomiya de las 18:10, había muchísima gente en el aeropuerto y los trámites se nos complicaron, tardando hasta las 19:05, es decir, 2 horas 25 minutos, pero quedando ya con una residence card nuevecita y reluciente.

A las 17:13 compré el tiquete de bus a Utsunomiya (4200 en) y tras enviar un par de correos rápidos para notificar de mi llegada, partí hacia allá a las 19:40. Ahí me encontré con una señora de Shang Gai y con su hija, una chiquita de unos 5 años, que de inmediato me adoptó como su juguete: me tocaba la barba, me escalaba, me ponía a jugar con ellajapón mo, no se quedaba un silencio un momento. Total, quedé más cansado de lo que ya iba. Creo que voy a tener más cuidado con los chiquitos de por acá.

Llegué al hotel a las 22:30 y entré inmediatamente. Me cobraron 6500 yenes (desayuno incluido). En el cuarto contacté a mucha gente por Skype, me bañé y actualicé el blog, subiendo incluso un video a youtube, que aquí les dejo:



Para variar y a pesar de que estaba muy cansado, me acosté en la madrugada nuevamente.

Hasta aquí la narración de hoy.

Estos primeros días estaré escribiendo casi a diario, pero según el tiempo pase, iré publicando con semanas de distancia. Gracias por leer todo esto.

miércoles, 2 de abril de 2014

¡Hacia la tierra de los samurai!

Los Ángeles, California, Estados Unidos. Martes 01 de abril (2014)

A final de cuentas no pude dormir casi nada. Terminé acostándome a eso de las 4:30 y levantándome a las 4:55.

Tras las últimas despedidas, Douglas (mi cuñado), mi hermana, mi sobrinita y mi papá fueron a dejarme al aeropuerto, pero salimos más de media hora más tarde de lo que habíamos acordado.

Por suerte no habían filas para pagar el impuesto de salida, pero por un error, me confié al ver que no había fila en United Airlines, mientras llenaba la boleta de la aduana. El error consistió en que no era por esa aerolínea que iba a viajar sino por American Airlines, cuya fila estaba repleta.

Cuando me despedí de papá y Elsy y unos cuatro minutos después de que ellos se habían marchado, me acordé que yo todavía tenía el celular de Anita. Intenté llamar a Elsy, pero el celular estaba bloqueado y no me lo permitió. Tuve que salir corriendo del aeropuerto, pedirle a un señor que me llamara para que se desbloqueara el teléfono y luego volver a llamar a Elsy. Ya iban de camino y tuve que esperar unos minutos a que finalmente llegaran al aeropuerto. Qué triste ser como yo... quedé de último en la fila y terminé de hacer el check-in a eso de las 07:25. Me acerqué a las otras becarias y me fui con ellas a la aduana.

El vuelo salió de la puerta 2 a las 08:38. Me pareció que pudimos ver el Irazú, el Turrialba y el Poás, pero en varias horas no hubo nada interesante en el viaje, pues aunque me tocó una ventana tenía una ala cerca. Además, estuvo nublado, por lo que no se podía ver mucho.

Llegamos al aeropuerto Forth Worth International de Dallas a las 12:37, con lo que la duración del viaje fue de 3 horas 59 minutos. La hora local de Texas es de una hora más que la de Costa Rica, por lo que realmente llegamos a las 13:37, hora local.

Cuando se entra a los Estados Unidos, son necesarios tres pasos: pasar por la entrevista de un funcionario de migración, la recuperación del equipaje (posterior a la declaración del mismo) y como era un transbordo, volver a hacer un check-in del equipaje para el siguiente vuelo. Especialmente el primer trámite nos hizo tardar más de la cuenta. Como Diana se separaba de nosotros a partir de ese aeropuerto, la despedí y deseé suerte y nosotros abordamos el siguiente avión a las 15:42 (hora local 16:42).

Llegamos a Los Ángeles a las 18:47 (la hora local, a diferencia de Texas, es una hora menos que Costa Rica, es decir, las 17:47), con lo que tardó un total de 3 horas 5 minutos.

Mientras esperamos el shuttle del hotel Radisson Los Ángeles, pasó mucho más tiempo del estimado, pues no fue hasta sino las 19:54 (18:54, hora local) que logramos abordarlo. El frío era bastante fuerte, así que requirió que nos equipáramos con abrigos.

Al llegar al hotel, detectaron que extrañamente bajo mi nombre había cinco reservaciones, lo que hubo un breve atraso. Tal y como ya me habían avisado, me asignaron un cuarto para mí solo (el número 825), mientras a Verónica y Monserrat les tocó el 836 y a Karla el 846.

En Google Maps, encontramos que había un Subway cerca y fuimos a comer en él, pues el restaurante del Radisson era muy caro. Yo no soy mucho de esta comida, pero me arriesgué a pedir un sandwich de un pie de largo, del cual solo me pude comer la mitad.

Regresando sacamos algunas fotografías y me dirigí al cuarto. Contacté a Luis vía Skype y así hablé con la familia una media hora. Parece que todo está en orden.

Aunque sigo sin dormir casi nada, no me acosté hasta haber publicado esto en mi blog y posteriormente, bañarme.


¡Espero mañana con ansiedad!

martes, 1 de abril de 2014

Cumpliendo el mayor de todos los sueños

San Luis, Santo Domingo, Heredia, Costa Rica. Martes 01 de abril (2014):

Cualquiera que me conozca sabe que siempre he querido vivir en Japón. No viajar, vivir en Japón. Desde aproximadamente 1993, tuve la idea inicial, aunque en aquel entonces el asunto parecía imposible.

He investigado durante mucho tiempo opciones, costos, ventajas y desventajas y llegué a concluir cerca del año 2002, que la mejor forma, la más plena y segura, sería mediante una beca. Por eso, especialmente tras el voluntariado a Honduras del 2004-2005, decidí trabajar específicamente para ganar una de las becas del gobierno japonés (Monbukagakusho). Es así como tras iniciar como administrativo en la UCR, reinicié un bachillerato universitario (esta vez en Ciencias Políticas) en el año 2008, 10 años después de que iniciara mi primer bachillerato (Computación en Informática).

La presión y el principal problema era la edad. La edad máxima para las becas son los 34 años al momento de aplicar. Cuando me gradué en febrero del 2013 tenía 32 años. Si fallaba, tendría pocas oportunidades.

Dejando de lado todo lo que siguió: los documentos, los exámenes, la entrevista y la selección final, así como el duro proceso para obtener las cartas de aceptación, lo que importa es el hoy y el ya: ¡estoy a menos de 7 horas de partir hacia Japón!

Todavía no he terminado de empacar (de hecho, creo que podré acostarme hasta dentro de al menos una hora), pero creo que todo va bien.

¿Qué se siente cumplir un sueño?

Genial. Sin más que decir.

Quizás en otro momento explique el largo camino a la beca, de momento, me dedicaré a ir contando paso a paso mi viaje a Japón, y sobre todo, mi vida allá.

Mi primer viaje a la región San'in

Higashihiroshima, Hiroshima, Japón. Viernes 25 de octubre (2019):   Ya tengo un poco más de 2 años y medio viviendo en la prefectura de Hir...